El gestor ambiental comentó en “Enfoques cruzados” que la gestión de residuos sólidos en Perú solo ha sido atendida en Lima y Callao. Jorge Segundo Zegarra Reátegui denuncia problemática en nuestro país.
Generación de residuos sólidos en el Perú
En el Perú, la generación de residuos sólidos es un desafío creciente debido al aumento de la población, el desarrollo urbano y el consumo diario. La mayoría de estos residuos provienen de áreas urbanas y se componen principalmente de materiales como plástico, papel, cartón, vidrio, metal y residuos orgánicos. A pesar de los esfuerzos realizados en materia de gestión de residuos, todavía existen deficiencias en la recolección, transporte, tratamiento y disposición final adecuada de los desechos en muchas partes del país.
La gestión sostenible de los residuos sólidos se ha convertido en una prioridad para las autoridades y la sociedad civil, con un enfoque en la promoción del reciclaje, la reducción en la fuente y la implementación de prácticas de disposición final más seguras y respetuosas con el medio ambiente. ¿Cuál es el problema en esto? Aún existe una gran cantidad de residuos que no se disponen correctamente, terminando en botaderos insalubres.
La gestión de residuos sólidos en el Perú aún es un desafío. En el año 2022, se generaron un total de 8 millones 214,355.90 toneladas de residuos municipales. Las toneladas mencionadas presentaban una composición variada que incluía un 56.70% de residuos orgánicos, 20.94% de residuos inorgánicos, 12.66% de residuos no aprovechables y un 9.71% de residuos peligrosos. Aunque el 77.64% de estos residuos tiene potencial de valorización, solo una pequeña fracción, equivalente al 1.80% del total generado, se valorizó efectivamente durante el año. A través del programa de incentivos para la mejora de la gestión municipal, algunas municipalidades lograron valorizar residuos sólidos orgánicos e inorgánicos, representando un paso hacia una gestión más sostenible de los desechos en el país. Sin embargo, queda claro que aún hay un largo camino por recorrer para mejorar la gestión integral de los residuos sólidos en el Perú.
Petramás y su eficiente gestión integral de residuos
Petramás es una empresa peruana, que es reconocida por la ardua labor por su presidente de directorio, Jorge Segundo Zegarra Reátegui. Desde hace más de 30 años viene realizando una gestión ambiental extraordinaria. El empresario lleva a cabo procedimientos con tecnología que parten de su “Ciclo virtuoso”, donde se aborda la disposición de residuos, recojo, transporte y, dentro de sus plantas procesadoras, la gestión integral de residuos sólidos para así, generar energía renovable a partir de la basura, además de la mitigación de gases de efecto invernadero.
Gracias a estos procesos, ha reducido más de 6 millones de toneladas de CO2, ha obtenido la certificación de la ONU por 1.5 millones de toneladas, y tiene 2.5 millones de toneladas en proceso de certificación, demostrando su compromiso con la preservación ambiental.
Problemática actual: Menos botaderos informales para una correcta gestión integral de residuos sólidos en el Perú
Se sabe que en Lima generó en el 2021, diez veces la cantidad de basura por domicilio que la región Lambayeque. La única diferencia es que, en Lima, ya se cuentan con plantas procesadoras de residuos sólidos donde de forma correcta.
En el Perú, se han identificado numerosos botaderos informales en diferentes regiones del país, especialmente en zonas urbanas marginales. Estos botaderos no autorizados carecen de medidas de protección ambiental y sanitaria, provocando contaminación y riesgos para la salud pública. Las autoridades promueven gestión de residuos y reciclaje. Sin embargo, la erradicación completa de los botaderos informales sigue siendo un desafío importante que requiere una acción coordinada a nivel local, regional y nacional. Entre los botaderos más preocupantes se encuentran el botadero “El Milagro” en Trujillo y “Reque” en Chiclayo.
Los botaderos presentan múltiples problemáticas, siendo tres las más críticas
Contaminación Ambiental:
- Suelo y Agua: Los desechos no gestionados adecuadamente pueden filtrar sustancias tóxicas al suelo y cuerpos de agua cercanos, afectando la calidad del agua subterránea y superficial.
- Aire: La quema de residuos en botaderos informales libera contaminantes y gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono (CO₂) y el metano (CH₄), contribuyendo al cambio climático y afectando la calidad del aire, lo que puede causar problemas respiratorios en la población cercana.
Riesgos para la Salud Pública:
- Enfermedades: Los botaderos informales son focos de proliferación de vectores de enfermedades, como ratas, moscas y mosquitos, que pueden transmitir enfermedades como el dengue, el zika y la leptospirosis. Además, los residuos médicos y químicos pueden causar intoxicaciones y quemaduras.
- Impacto en Comunidades: Las comunidades que viven cerca de estos botaderos enfrentan un mayor riesgo de enfermedades respiratorias, dermatológicas y gastrointestinales debido a la exposición constante a contaminantes.
Impacto Social y Económico:
- Degradación del Paisaje: Los botaderos informales desfiguran el paisaje, afectando el valor de las propiedades cercanas y limitando el desarrollo turístico y recreativo de la zona.
- Costos de Remediación: A largo plazo, la limpieza y rehabilitación de áreas contaminadas por botaderos informales representan un costo económico significativo para las autoridades locales y nacionales. Además, la falta de gestión adecuada de residuos puede llevar a la pérdida de materiales que podrían ser reciclados o reutilizados, afectando la economía circular.
Estos problemas subrayan la necesidad urgente de implementar sistemas de gestión de residuos.
Jorge Segundo Zegarra Reátegui denuncia problemática del pasado oscuro en el Callao
Esta problemática también afectó al Callao. ¿Y cómo se solucionó? Jorge Zegarra Reátegui cambió la realidad de lo que atentaba contra la salud ambiental en el Callao con la existencia del botadero de ese entonces: La Cucaracha. En el 2004, asumió el gran reto de reconvertir ese vertedero en un relleno sanitario autorizado a favor de la comunidad con tecnología de punta. Hoy, en callao, gracias a Jorge Zegarra Reátegui se genera energía eléctrica a partir de la basura.
Jorge Zegarra Reátegui denuncia problemática y cierre de botaderos informales
En una entrevista con Canal N, el empresario destacó la grave problemática de los botaderos contaminantes en el interior del país, especialmente «El Milagro» en Trujillo. Actualmente, más del 90% de los residuos de la provincia terminan en este botadero, donde los montículos de basura superan los 20 metros de altura.
Jorge Zegarra Reátegui denuncia problemática de la basura en la actualidad. El empresario peruano, pionero y gestor de energías renovables busca hacer realidad en Trujillo lo que logró en Callao años atrás. Para el, es posible la reconversión de un botadero insalubre en un verdadero relleno sanitario formal con proyectos exitosos que beneficien la preservación del medio ambiente.
“Es posible y es factible recuperar un botadero y convertirlo en un relleno sanitario”, afirmó Zegarra Reátegui durante la entrevista en el programa “Enfoques Cruxados” con presencia de la exdirectora de residuos sólidos del gobierno.
Botadero «El Milagro»
Los botaderos a cielo abierto son una fuente significativa de contaminación, liberando metano, gas de efecto invernadero mucho más potente que el dióxido de carbono. Además, contaminan el suelo y las aguas subterráneas con lixiviados tóxicos, afectando la salud pública y los ecosistemas locales. En Trujillo, Perú, el botadero «El Milagro» es una amenaza ambiental, albergando aproximadamente 2 millones de toneladas de basura mal gestionada. Funcionando desde 1989, este vertedero es uno de los 20 más grandes del mundo.
«El Milagro», de 58 hectáreas y ubicado a 13 kilómetros del centro de Trujillo, acumula más de 4,5 millones de toneladas de residuos. Miles de recicladores informales, incluidos niños, trabajan aquí sin protección adecuada, poniendo en grave riesgo su salud. Además, chancherías informales alrededor del botadero alimentan a los cerdos con desperdicios, generando riesgos sanitarios para los animales y las personas que consumen su carne.
Por ello, resulta importante contar con entidades interesadas en realizar una verdadera transformación ante la denuncia ambiental por la contaminación de este lugar. Es el caso de Petramás, empresa cuyo presidente de directorio, Jorge Zegarra Reátegui, busca reaprovechar el espacio para hacerlo una zona de preservación ambiental como y ya lo hizo antes con el proyecto “Modelo del Callao”.
Para más información sobre la propuesta de Petramás en Trujillo, visualiza el siguiente video:
Jorge Segundo Zegarra Reátegui denuncia problemática y necesidad de la revalorización de los residuos
El camino más fácil que se toma es desechar los residuos sin ningún protocolo de seguridad. Sin embargo, si tuviéramos claro que se puede hacer muchos más con ellos, ¿seguiríamos procediendo así?
Jorge Zegarra Reátegui, afirma que es posible y factible convertir los residuos sólidos en energía verde a favor del medio ambiente. Reaprovechar los residuos sólidos y convertirlos en energía verde es un gran aporte para abordar desafíos ambientales y energéticos. Este proceso reduce la cantidad de desechos que terminan en los vertederos, disminuyendo así la contaminación del suelo, aire y agua.
Por otro lado, permite generar una fuente renovable que puede sustituir a los combustibles fósiles, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero y ayudando a mitigar el cambio climático. Esta práctica también promueve la economía circular, donde los residuos se ven como recursos valiosos, contribuyendo a una gestión más sostenible y eficiente de los recursos naturales.
Petramás, a través de sus macro proyectos cuenta con la capacidad de convertir la basura en energía verde a partir de un riguroso proceso llamado “Ciclo Virtuoso”. Este proceso inicia cuando los vecinos a diario generan residuos, los cuales son recogidos y transportados a los rellenos sanitarios. Aquí, son sellados en celdas de geomembrana bajo altos estándares de calidad y seguridad. Seguido a ello, el gas recolectado pasa a termoeléctricas, donde ocurre la reconversión a energía limpia. Luego, esta energía es transportada a través de redes de subtransmisión, llegando así a miles de hogares peruanos a través de las concesionarias correspondientes.
Para mayor información sobre Petramás y Jorge Segundo Zegarra Reategui, ingresa a los siguientes enlaces: